10/3/08

Nadie te querrá como te quiere tu madre


La ganadora: Hace unos días se celebró el día de la mujer trabajadora. Es triste que haya que hacer un día para revindicar algo, puesto que eso quiere decir que no existe normalidad y que siguen existiendo diferencias entre el hombre y la mujer en cuestiones laborales y de mantenimiento del hogar.

Una de las razones por las que se celebra el día de la mujer trabajadora es para honrar a aquellas señoras que en el pasado lucharon por sus derechos en un mundo dominado por los hombres. Una de esas mujeres es sin duda alguna Evelyn Ryan, que tuvo que mantener a sus 10 hijos ganando en concursos organizados por las grandes corporaciones para promocionar sus productos, ya que su marido era un cero a la izquierda que gastaba la mayor parte de su sueldo en bebida.

Esta película, basada en una biografía que escribió una de sus hijas, es un homenaje que se le hace a esta gran mujer que se valió de su ingenio para salir a flote una y otra vez. No podía haber sido un homenaje mejor si no hubieran contratado a Julianne Moore para encarnarla en la pantalla. Esta excelente actriz consigue crear un personaje tierno y agradable sin abusar de los pucheros. La película en su conjunto no llega nunca a caer en el dramón dulzón y sensiblero que podía haber sido perfectamente, sino que se mantiene en línea recta ofrenciendo emoción pero sin exasperar.




Aunque haya pasado desapercibida por los cines la película debería ganar popularidad para que al menos la utilizaran en colegios y universidades. Es un buen ejemplo del papel que le ha tocado a la mujer en la sociedad a lo largo de la historia. Y ala, ya se acabó la clase de sociología por hoy.

***1/2

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