19/8/17

La espía que me pateó el trasero

Poster Atomica

Dir.: David Leitch
Int.: Charlize Theron, James McAvoy, Sofia Boutella, Eddie Marsan, John Goodman, Toby Jones, Bill Skarsgård, Til Schweiger
¿De qué va?: Lorraine Broughton es una espía de alto nivel del MI6 que se traslada a Berlín poco antes de la caída del muro con el objetivo de encontrar una lista que contiene la lista con los nombres de todos los informadores de las agencias de inteligencia del mundo occidental. Lorraine deberá formar equipo con el jefe de la sección de la capital alemana, David Percival, desatando todo su arsenal de habilidades para impedir que se produzca una Tercera Guerra Mundial.

Reseña: La dupla de directores formada por Chad Stahelski y David Leitch consiguió aunar en John Wick (2014) la acción visceral y física de Jason Bourne con el efectismo y desparrame de las películas clónicas de Jason Statham, dando como resultado una de los films más efectivos y mejor rodados del cine de acción de la última década. Tras el éxito cosechado, ambos han decidido probar suerte por separado, dirigiendo el primero la continuación de aquella, John Wick: Pacto de sangre (2017), y el segundo una revisión de la misma en clave femenina y retro. Atómica se inspira en la novela gráfica The Coldest City de Antony Johnston para conformar un thriller de espías de la vieja escuela en el que nadie es lo que parece, ni siquiera su protagonista. Lo único de lo que podemos estar seguros es de la mala suerte que correrán aquellos que se atrevan a cruzarse en su camino.

Atomic Blonde (2017)

Leitch exprime todo el jugo que se le puede sacar al contexto del Berlín de finales de los 80 con una ambientación entre ruinosa y polvorienta, gris y fluorescente, acompañada de una banda sonora llena de hits de la época y covers modernos integrados perfectamente en la acción. La trama, de premisa sencilla, va enredándose más y más conforme pasan los minutos hasta dar dos o tres piruetas finales demasiado confusas, de complejidad sólo aparente y sacadas de debajo de la manga. Tampoco ayuda que se tome excesivamente en serio, con unas gotas de humor demasiado esporádicas. No obstante, la película goza de dos grandes virtudes que son las que nos mantienen enganchados sin que los mareos argumentales nos pasen gran factura: Charlize Theron (muy bien secundada por James McAvoy), y las escenas de acción. Consagrada en Mad Max: Furia en la carretera como una de las reinas del género, la oscarizada actriz demuestra una vez más que no tiene reparos en maltratar su belleza natural mostrándose magullada, ensangrentada y apaleada, verosímil tanto al dar golpes como al recibirlos, y exhibiendo una apariencia fría, inteligente y misteriosa que no está exenta de sufrir perturbaciones cuando, por mucho que se esfuerce, es incapaz de proteger a aquellos que la necesitan. Charlize ha sido y siempre será una rubia atómica por méritos propios.

Atomic Blonde (2017)

El otro gran aliciente del film, la acción, continúa el estilo imaginativo y perfectamente coreografiado y plasmado por la cámara de John Wick, alcanzando su clímax en un largo plano secuencia en el que la banda sonora está compuesta esencialmente por golpes, disparos y gritos de dolor. La pelea en el rellano de un bloque de viviendas es tan portentosa, asombrosa, dolorosa y desmesurada que será aquello por lo que Atómica será recordada en el futuro. Quién tiene la dichosa lista de nombres o a qué bando pertenece realmente cada personaje es lo de menos, porque el auténtico deleite e interés de la película reside en ver a su heroína demostrando que los moratones no van reñidos con ser y lucir espectacular.

6’5/10


No hay comentarios: