31/5/13

O.C: Los santos inocentes (1984)

Poster Los santos inocentes¿De qué va?: Durante la década de los 60, en la España franquista, Paco y Régula forman, junto a sus tres hijos, una familia de campesinos a las órdenes de los señores del cortijo, aguantando toda clase de órdenes y humillaciones sin ninguna queja. La situación empieza a ponerse más tensa cuando se presenta Azarías, el hermano deficiente mental de Régula, y empieza a trabajar con ellos.

Reputación: Cuando el productor Julián Mateos leyó la novela Los santos inocentes de Miguel Delibes adquirió rápidamente los derechos para realizar su adaptación cinematográfica, y contactó con Mario Camus para que se encargara de su dirección. La elección del cineasta no fue casualidad, pues recientemente había cosechado un gran éxito con La colmena, adaptación de otro libro que guardaba varios elementos en común con el proyecto en cuestión. El rodaje se realizó entre las ciudades extremeñas de Mérida, Zafra y Alburquerque y su estreno se saldó con un rotundo éxito de taquilla para el cine español, con 3 millones de euros de recaudación. Obtuvo una gran repercusión internacional gracias a que se presentó en el Festival de Cannes y obtuvo el premio a mejor interpretación masculina, que compartieron Alfredo Landa y Paco Rabal. Cuando Rabal subió al escenario a recoger el premio y, a pesar de la prohibición de que los ganadores hablaran, se acercó al micrófono y susurró “¡Milana bonita!”, arrancando una gran ovación en el público.

Los santos inocentes

Comentario: Historia de criados y señores que refleja la situación social de la España franquista, ambientada en un cortijo que muestra la jerarquización de los roles y un sistema casi feudal en el que los propietarios de la finca son tratados como reyes y sus trabajadores como el populacho que ha nacido para servir a sus superiores con fervor. A través de un ritmo pausado y un estilo hiperrealista vamos descubriendo la doble moral de los señores y la resignación de los campesinos, aunque hay cabida para la esperanza de que se produzca un cambio en las nuevas generaciones, que buscan algo más para sus vidas. Interpretaciones de órdago, (exceptuando a la hija mayor, que recita sus líneas con parsimonia), y un desenlace impactante redondean un filme tan áspero como valioso.

Próximo visionado: Los paraguas de Cherburgo (1964)

No hay comentarios: