¿De qué va?: A los doctores expertos en parapsicología Venkman, Stantz y Spengles les deniegan la beca de investigación que habían solicitado. Al encontrarse sin trabajo, deciden fundar una empresa en Nueva York dedicada a la limpieza de ectoplasmas por encargo. El aumento repentino de espectros en la ciudad levantará las sospechas en el grupo de que un poderoso demonio está a punto de hacer acto de presencia.
Reputación: En un principio, Los cazafantasmas estaba concedida como una película muy distinta, como vehículo del lucimiento de la pareja formada Dan Aykroyd y John Belushi. Sin embargo, el proyecto se desarrolló de forma diferente ante la muerte por sobredosis del segundo y el excesivo coste que exigía trasladar la historia a la gran pantalla (unos 300 millones de dólares de la época), pues la idea original era hacer una oscura película futurista en la que los protagonistas viajaban por el tiempo enfrentándose a diferentes fantasmas. Harold Ramis se encargó de readaptar la historia junto a Aykroyd, ajustando la planificación presupuestaria a 30 millones de dólares y otorgándole una vis cómica que daría cancha a la improvisación de los actores. Bill Murray fue fichado para encarnar el papel destinado a Belushi, mientras que Ramis asumió otro de los personajes protagonistas tras dejarse convencer por Aykroyd, y pese a que en un principio sólo se iba a encargar del guión.
Para el tráiler del film utilizaron el mismo anuncio de televisión que aparece en el metraje, en el que el equipo promociona sus servicios, pero con un número de teléfono auténtico, que recibió más de mil llamadas y en el que se podía oír un mensaje grabado por los protagonistas avisando de que estaban en la calle atrapando espectros. La película fue nominada a dos Oscar: mejores efectos especiales y mejor canción, pero pese a lo pegadizo que resulta el tema de Ray Parker Jr., que lideró durante tres semanas consecutivas la lista de ventas, perdió la estatuilla frente a Stevie Wonder. Su éxito de taquilla propició una secuela, tres series de animación, videojuegos y muchísimo merchandising. Tras años intentando sacar una tercera parte de forma infructuosa ante la constante negativa de Bill Murray y la muerte de Harold Ramis en el año 2014, finalmente Sony estrenará el próximo verano una continuación en clave femenina, dirigida por Paul Feig (La boda de mi mejor amiga) y protagonizada por Melissa McCarthy y Kristen Wiig.
Reseña: ¿Puede envejecer mal una película pero no su legado? Vista ahora, Los cazafantasmas es una comedia llanamente entretenida, en buena parte simpática gracias a su reparto, pero no especialmente graciosa, sin ningún gag o línea de diálogo memorable, pero sí con imágenes que han conseguido perdurar como la escena del Hombre de Malvavisco gigante paseándose por Nueva York o la de la seducción de una poseída y escultural Sigourney Weaver. Sin embargo, quién no es capaz de reconocer su mundialmente conocido logotipo, o de ponerse a canturrear la genial canción de la película, todo un icono de los 80. La importancia de la película no reside tanto en su calidad artística como en el cariño que le profesa el sector cinéfilo, como se evidencia en el homenaje “suecado” que le hacen en Rebobine, por favor (2008). Será interesante ver cómo trasladan su encantador y naíf espíritu ochentero a los tiempos que corren en el largamente esperado regreso de la saga.
Próximo visionado: El ansia (1983)
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