4/3/13

Un fin de semana para recordar

Poster Weekend

Dir.: Andrew Haigh
Int.: Tom Cullen, Chris New, Jonathan Race, Laura Freeman
¿De qué va?: Un viernes noche, tras una fiesta en casa de unos amigos, Russell visita un club gay con intenciones de ligar. Justo antes del cine conoce a Glenn y es entonces cuando empiezan a conocerse a lo largo del fin de semana.

Reseña: Los románticos cinéfilos de pro están esperando como agua de mayo el estreno de Before Midnight, el ¿fin? del periplo amoroso vivido por Ethan Hawke y Julie Delpy a lo largo de varias décadas. Sus encuentros previos, paseando por hermosas ciudades europeas mientras conversan sobre miles de cosas, pero sobre todo sobre el amor y la vida, han cautivado a miles de personas que saben que las relaciones no son como nos las pintan la mayoría de comedias americanas pero que aún así siguen creyendo en el romanticismo. Para todos aquellos que quieran amenizar la espera, les recomiendo que le echen un vistazo a Weekend, pequeña película cortada con el mismo patrón pero centrada en una pareja homosexual.

Weekend3

Tal y como avanza el título, la película abarca el fin de semana que pasan los protagonistas, Russell y Glenn, juntos. Al principio lo que hay entre ellos es únicamente sexo casual, pero conforme se van conociendo irá surgiendo algo más. Las conversaciones entre ellos no comprenden tanta variedad de temas como las de Jesse y Celine, pero a través de ellas sí que descubrimos datos muy importantes, como que Russell está más acomplejado por su condición sexual que Glenn, y averiguamos entre otras cosas qué es lo que le ha pasado a este último para que se comporte de forma tan condescendiente. Los diálogos se desarrollan de forma tan natural y los actores están tan bien que parece que, o bien los están improvisando, o que son así de verdad y que los estamos viendo a través de una cámara oculta.

Weekend

Weekend también sirve para romper tabúes y prejuicios sobre la homosexualidad, aunque se permita reincidir en el tópico del consumo de drogas por parte de los gays. Por supuesto que habrá quien se drogue, pero es un aspecto que se utiliza mucho en el cine queer y al menos en este caso ni siquiera es fundamental para la trama. Es el único ‘pero’ que le pongo a esta triste y románticamente realista película que aunque de entrada llamará más la atención del público gay va más allá de la condición sexual, puesto que toca tan temas universales como la intimidad, el amor, el sexo o la irónica incapacidad que tenemos de relacionarnos en un mundo tan comunicado como el que vivimos, con los que se sentirán identificados hasta los más homofóbicos del lugar.

8/10

1 comentario:

David dijo...

El tratamiento de la homosexualidad es el punto bueno que le encuentor a Weekend. ¿De verdad es necesario sostener planos durante 10 minutos sin que pase nada ni se cree tensión? ¿O esas conversaciones en las que se exageran los silencios? Claro que en la vida real hay silencios, pero en esos momentos la gente no se suele quedar al vació con cara de estar solucionando todos los problemas del mundo.

Es la gran moda alctual del cine indie: querer hacer lo que Haneke sin ser Haneke, ralentizar la acción hasta que casi no pasa nada.

De esas pocas veces de estar en el cine y desear que la película se acabe de una vez, en serio.